Cuando un cachorro llega al mundo, depende de su mamá que le da calostro, una sustancia que lo protege de enfermedades durante sus primeros días. Cuando los separamos aún no está completamente protegido contra enfermedades, por eso es importante llevarlo al veterinario para que le de las vacunas necesarias y pueda tener un desarrollo saludable.
Te recomendamos tener a mano su cartilla de vacunación y desparasitación para llevar un control y ser puntual con la aplicación. Ten extrema precaución y evita el contacto con otros animales si tu mascota no ha terminado su proceso de vacunación y desparasitación. Trata de no llevarlo a lugares públicos, pues el pequeño es propenso a enfermarse.
Tu veterinario, será el encargado de definir un programa de vacunación para tu mascota, según su edad, estado de salud y el estilo de vida que puede llevar, tú debes seguir al pie de la letra esas pautas para evitar cualquier enfermedad y que tu pequeño pueda crecer fuerte.
Tu cachorro puede presentar algunos síntomas que no duran mucho y se consideran normales luego de ser vacunado, como un poco de fiebre o parecer decaído, si notas que este proceso se extiende consulta inmediatamente con tu veterinario.
No te olvides que aunque tu cachorro crece y se ve cada vez más fuerte, debes estar al día con la aplicación de vacunas.
Que haya terminado éste proceso, no quiere decir que tu mascota no puede enfermarse. Procura estar siempre pendiente de posibles síntomas o enfermedades y si ves que presenta alguno de éstos, visita a tu veterinario:
- Falta o pérdida de apetito y/o sed excesiva
- Ánimo decaído y falta de energía
- Sangre en la orina
- Vómitos persistentes
- Respiración irregular
- Cambios en la condición de su piel
- Cambios en su pelaje
Una vez que hayas completado el proceso de vacunación de tu cachorro, consulta con tu veterinario si estará listo para salir a la calle y comenzar a explorar el mundo.